El Fondo Monetario Internacional prevé una desaceleración significativa del crecimiento económico mundial en 2025, como consecuencia de la intensificación de la guerra comercial, la incertidumbre política y el enfriamiento del consumo.
Según el organismo, el avance de la economía de Estados Unidos se reducirá en alrededor de un punto porcentual, hasta situarse en el 1,8%. Además, la probabilidad de que el país entre en recesión aumentó al 40%. Para 2026, se espera que el crecimiento estadounidense llegue al 1,7%.
A nivel global, el FMI rebaja su estimación de expansión para 2025 del 3,3% al 2,8%. Aunque prevé una recuperación hasta el 3,0% en 2026, advierte que una escalada de las tensiones comerciales y la erosión de los márgenes de maniobra de las políticas monetarias podrían debilitar aún más la dinámica económica. La probabilidad de una recesión mundial se sitúa actualmente en el 30%.
En materia de inflación, el Fondo proyecta que los aranceles harán subir los precios en Estados Unidos hasta el 4% y generarán presiones similares en otras economías desarrolladas, pese a una moderación general de la inflación global.
Finalmente, el informe recomienda que los bancos centrales solo consideren recortes de tasas si existen pruebas claras de una caída sostenida de la inflación.

